Adicciones

Una de las características principales para determinar si nos encontramos ante un problema de adicciones es el descuido de las actividades normales. Es una de las señales de alarma que nos pueden informar de que está ocurriendo un problema. Habría que determinar de que sustancia estamos hablando en cada caso, si nos referimos al alcohol, cannabis, estimulantes, alucinógenos, cocaína, tabaco…

¿Cómo afecta un problema de adicciones?

Normalmente la persona que consume algún tipo de sustancia suele tener en mente el abandono del consumo pudiendo llegar a intentarlo en alguna ocasión. También suele ocurrir que se sigue consumiendo a pesar de sufrir las consecuencias o problemas sociales, físicos o laborales que pueda estar suponiendo. Nos referimos a abandono de responsabilidades, de situaciones de ocio, generándole conflictos en su vida personal y en el buen funcionamiento de la misma. A su vez se suele invertir mucho tiempo en conseguir la droga, en consumirlo y en su recuperación tras su consumo.

Uno de los problemas de consumo de drogas o sustancias es lo que denominamos como “tolerancia”. Nos referimos a que cada vez necesitamos más cantidad de la sustancia para notar los mismos efectos, por lo que las consecuencias y la adicción van aumentando también.

Tratamiento

Las adicciones están muy relacionadas con el autocontrol y con el manejo de las emociones. Una intervención eficaz tiene en cuenta estos aspectos, ayudando a la persona a adquirir las habilidades necesarias para
enfrentarse al consumo
Además tiene que tener en cuenta la parte emocional y cognitiva del afectado, si no, las herramientas no se conseguirán aplicar y el abandono de la terapia y las recaídas pueden producirse.

En la consulta del psicólogo se tiene que valorar la historia personal de cada asistente para poder ajustarse a sus características individuales, teniendo en cuenta el momento vital actual, sus circunstancias y los factores personales y sociales que inciden en el consumo y que lo determinaron en su origen. La intervención debe ser integral, incluyendo todos los dispositivos que sean oportunos si se necesitaran, para ofrecer un tratamiento efectivo que ayude a la adherencia al tratamiento, a la constancia, y la responsabilidad ante su adicción, y pueda así comprometerse con el abandono del consumo.

Otras adicciones

Hoy en día además de las adicciones a sustancias también hay que ofrecer un apartado a los problemas de adicción sin sustancias como son videojuegos, móviles… Cada vez nos atrapan más estos dispositivos, con la difícil valoración personal sobre si pueden estar teniendo un problema o no. Cuando al igual que con el criterio de las adicciones a sustancias se produce un deterioro en el funcionamiento diario de la persona y cuando sufro problemas relacionales y emocionales podríamos estar hablando un problema con el manejo y el uso de estos dispositivos. Desde una buena psicoeducación y unas buenas estrategias emocionales y comportamentales se puede ir aprendiendo a manejar la tecnología tan presente en nuestro día a día.

También valoramos en este apartado problemas de adicción al sexo y problemas de adicción al juego, valorando lo anteriormente expuesto, un indicador de la gravedad de estos comportamientos pudiendo clasificarse como adicción pasaría por la evaluación de las consecuencias de estas prácticas y su relación con ellas.

Es fundamental un buen análisis funcional del problema que presente cada afectado y se trabaje de forma individual para poder centrarnos en la problemática de cada uno, sea con la sustancia o no sustancia que se presente.